Tenía una sonrisa preciosa, realmente admirable
llena de alegría y viveza; sus ojos destellaban
destacando esa graciosa mueca entre sus mejillas
Siendo ella misma, habia conseguido tener la felicidad
Una familia, unos buenos amigos y un novio
que la querían.
Siempre había sido cariñosa, dulce y entrañable
pero esta maldita sociedad, la creó esa puta enfermedad
que la provocó el odio hacía sí misma y la desconfianza
y el rencor de quien la intentaba ayudar.
Sufría ataques de ansiedad que la llevaban a herirse
psicologógicamente, empezó a vomitar;porque su reflejo
ante el espejo,no era perfecto.
Su obsesión por mostrar el rechazo al que se sometía
la convirtió en una persona agresiva e introverta
solo fijaba sus metas en adelgazar...
Esos ataques de ansiedad,se convirtieron en negar
cualquier cantidad de comida hacía su estómago.
Su mente ofuscada, la llevo a estar encerrada
incapaz de luchar contra nada.
Ni darse cuenta del aspecto tan tenebroso que presentaba;
su carne,era pellejo que se transparentaba.
La cama del hospital quedó vacía,
preparada para intentar salvar la vida de su póxima inquilina
STOP